Opinión del experto nacional 24/01/2015 02:19
El sistema político enfrenta el riesgo de “oligarquización” del financiamiento político. La expresión popular “el que paga manda” no es un dogma, pero tampoco es del todo equivocada.
Por Javier Santiago Castillo*
El pasado 22 de enero, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral emitió un acuerdo por el que se determinan los límites que deberá observar la recolección de aportaciones de los particulares a los partidos políticos. Dio cumplimiento así a lo dispuesto por los artículos 53 y 56 de la Ley General de Partidos Políticos.
El sistema electoral mexicano ha tenido en el financiamiento público de la actividad política uno de sus pilares fundamentales. Mediante la dotación de recursos del erario a los partidos políticos se ha buscado preservarlos de intereses corporativos o mecenazgos que perviertan su acción y sustraigan sus decisiones del control de su militancia. Es por ello que el artículo 41, fracción II de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que la ley deberá “garantizar que los recursos públicos prevalezcan sobre los de origen privado”. Seguir leyendo «Los riesgos del financiamiento político privado»-Excélsior. →